Solidaridad Social

PROGRAMA DE ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD
1º Centro para la Niñez Aborigen “Adela T. de Ovando” 

FUNDAMENTACIÓN DEL PROYECTO

Diversos estudios poblacionales han indicado que más del 60% de los hogares están constituidos teniendo como cabeza de familia a la mujer, en virtud de la ausencia permanente de la figura paterna, configurándose así una patología social de raigambre cultural y educativa y que reconoce la interacción además de factores económicos, sociales y políticos.

Es esta población (la de la niñez temporalmente abandonada) el grave problema que data de antaño, y que constituye el eje de nuestras preocupaciones. Sostenemos que tal situación no admite otra solución que la necesidad urgente de implementar servicios de protección social para evitar que la ausencia regular de los padres, cabezas del hogar, en virtud de tener que salir a trabajar para ganar lo suficiente para proveer a las necesidades de la familia, produzca serios conflictos en la relación familiar-afectiva y en el desarrollo del niño/a.

Ello desde el punto de vista educativo-formativo; desde el punto de vista preventivo, es menester también reducir el alto índice de mortalidad por abandono temporal de los niños/as, quienes solos en las casas tienden a caer en conductas riesgosas en relación a la corriente eléctrica, cañerías de gas, animales en la casa (perros, etc.), y/o al cuidado de un inexperto en la materia, y en muchas ocasiones irresponsable, cuando no una persona violenta, psicópata, alcohólica, etc, que terminará descuidando a quienes están a su cargo, lo que produce consecuencias fatales, o bien abusando física y/o psicológicamente del menor, lo que devendrá en daños difícilmente reparables y que tendrá consecuencias determinantes para la posterior vida en relación.

El Centro, destinado a la niñez aborígen, pretende ser un servicio de socialización y estimulación tempranas. Tiene como metas fundamentales además de proveer cuidado, salud y atención nutricional, la estimulación y educación a través de la implementación de actividades adecuadas a sus necesidades y posibilidades, estableciendo lazos estrechos con la familia y la comunidad en general.


MARCO INSTITUCIONAL

El Centro es un proyecto de la FUNDACION CRECER-TARTAGAL, situada en la localidad de Tartagal al que adhiere la FUNDACION NUEVO en el marco del Programa “Atención a la Diversidad”, que tiene por objeto atender a la diversidad cultural, en este caso, de la localidad de Tartagal.

A tal efecto, se pretende instalar el Centro, en un edificio que albergue las condiciones requeridas y cuyo funcionamiento esté conformado por profesionales de la educación, la salud, y el derecho, a los fines del asesoramiento integral a las madres respecto de la crianza, cuidado y defensa de los intereses de sus hijos, a más de las ya mencionadas tareas de cuidado integral de los/as niños/as. Todo ello en colaboración con la FUNDACION CRECER-TARTAGAL principal responsable de la ejecución del proyecto mencionado.

Así, la FUNDACION NUEVO MILENIO proveerá, a través del marco convenio específico, de auxilio en la provisión de elementos necesarios para el sustento y mantenimiento de dicho centro. A continuación se detallan las principales características del proyecto referido.


FINALIDAD DEL PROYECTO

Mejorar la calidad de vida de la niñez aborígen, lo que se logrará paulatinamente, en diversas etapas, considerándose de vital importancia la estimulación temprana. La mencionada es la finalidad última, lo que no empece a la consecución de finalidades paralelas, y que se lograrán conjuntamente con la primera cuales son:

• Mejorar la calidad de vida de las madres de niños aborígenes.

• Concientización de la comunidad aborígen en general, de la necesidad de la educación temprana para una adecuada inserción social.

• Lograr hacer de quienes se encuentran sin esperanzas, hombres y mujeres de provecho para la sociedad y plenamente desarrollados en sus potencialidades, lo que devendrá en ciudadanos más felices.


OBJETIVOS

• Implementación del Centro.

• Contratación de personal idóneo en la materia en atención a los fines señalados.

• Implementación de servicio de capacitación y perfeccionamiento permanente del personal contratado.

• Adecuada atención de las necesidades primarias del niño/a aborígen.

• Adecuado asesoramiento y auxilio de los padres aborígenes respecto de la educación y cuidado integral de sus hijos.


ACTIVIDADES

• Cuidado y atención de niños/as aborígenes de 45 días a 5 años.
• Estimulación temprana a través de técnicas específicas.
• Alimentación diaria.
• Elaboración de informes individuales periódicos respecto de cada niño/a relativo a su estado de salud, aprendizaje, medio social, y observancia de sus derechos.
• Actividades recreativas. Todo lo expuesto con la asistencia de profesionales idóneos en las áreas de mención.


POBLACION BENEFICIADA

BENEFICIARIOS DIRECTOS:

• Niñez aborígen:
• Niños/as de 45 días a 5 años.
• Número proyectado de niños/as beneficiarios:
1º Etapa – período 2.000-2.001: 100 (cien) niños/as.

BENEFICIARIOS INDIRECTOS:

• Padres aborígenes
• Comunidad aborígen
• Comunidad en general.


La Fundación Nuevo Milenio ha sido cofundadora del 1º Centro de la Niñez Aborigen “Adela T. de Ovando” en la localidad de Tartagal, Provincia de Salta (Argentina) lugar en que niños aborígenes y mestizos de 0 a 5 años concurren diariamente y en el cual se satisfacen sus necesidades primarias, alimentación, vivienda, atención primaria de la salud y asistencia pedagógica elemental en forma gratuita. Se lleva adelante con fondos propios.

  • Tartagal, pueblo situado en el extremo norte de nuestro país, habitado además por amplios sectores compuestos por comunidades aborígenes (matacos, chirigüanos, etc.) y otros sectores desfavorecidos, ha visto a una importante porción de sus habitantes olvidados desde tiempo atrás, agravado hoy por la crisis socio-económica que afecta a todos los argentinos.

    Se evidencia entonces, sin piedad, la marginación, el desamparo, la desnutrición infantil, la desesperanza, en fin, la desolación. Empero, el fervor patriótico, y el amor por los símbolos nacionales no ha disminuido por ello, sino que por el contrario se ha acrecentado, convirtiéndose en soporte fundamental de sus vidas.

    Las mujeres aborígenes y/o mestizas, suelen trabajar la tierra, emplearse como domésticas u otros menesteres sacrificados, dejando en todos los casos a sus hijos en total desamparo, al cuidado muchas veces del mayor de los pequeños, o de alguna ocasional ayuda que pudiera encontrar, pero que carece por completo del conocimiento y la preparación adecuada para esta tarea. 

    Confiando y rogando a Dios que nada les suceda a sus hijos, emprenden marcha hacia sus trabajos, a veces con lágrimas en los ojos.